Fecha: 07/10/2019

Los perros poseen demandas nutricionales muy específicas para un crecimiento y desarrollo saludables. De cachorros a perros ancianos, cada fase de la vida lleva consigo requerimientos diferentes de proteína, grasa, carbohidratos y otros nutrientes.

Con un nicho cada vez más desarrollado, los piensos para mascotas específicos para grupos de edad diferentes se caracterizan como un gran potencial de mercado.

Sin embargo, es necesario tener un cuidado especial con los ingredientes a utilizar en este tipo de formulación para que los nutrientes estén disponibles para ser absorbidos y utilizados de forma eficaz por el organismo de los perros.

En este blog post, vamos a conocer más a fondo las demandas nutricionales específicas para cada fase de la vida de un perro y cómo esto se refleja en la formulación de pienso para los animales.

Las necesidades nutricionales de los perros

En general, un perro es considerado cachorro hasta el 6º o 7º mes de vida, cuando todavía está en fase de crecimiento. Sin embargo, algunas razas mayores pueden seguir creciendo hasta 1 año o más.

El destete, donde ocurre la transición de la leche materna a otros tipos de alimento, suele ocurrir entre 3 y 4 semanas de vida. Esta transición tarda en media 7 semanas.

A esta edad, el animal, por estar fase de desarrollo, necesita nutrientes suficientes para soportar esta rápida evolución. La dieta del perro necesita ser equilibrada para proporcionar suficiente energía para las actividades rutinarias del perro, mantener el cerebro y el cuerpo en pleno funcionamiento y apoyar el crecimiento.

Para ello, algunos nutrientes clave tendrán funciones muy específicas en el organismo del perro y éstos deben estar obligatoriamente presentes en los piensos de estos animales. Son ellos:

  • Las proteínas: ayudan en la construcción de los tejidos musculares, así como en el transporte de sustancias, en la comunicación entre los órganos, además de fortalecer el sistemas inmunológico.Pueden ser de origen vegetal o animal, siendo estas últimas de alto valor biológico debido a la digestibilidad elevada. La fase de la vida donde los perros son crías es aquella donde hay la mayor necesidad de proteínas, debido al crecimiento.
  • Grasas: mantiene la piel y el pelo saludables, ayudan en el desarrollo del cerebro y la visión.También son fuente de energía, cargan vitaminas liposolubles y poseen ácidos grasos esenciales.
  • Hidratos de carbono: la fuente primaria de energía.Los carbohidratos complejos, como los que componen los granos, son mejor digeridos cuando están cocidos. Esta regla vale para todas las fases de la vida de un perro.
  • Fibras: son carbohidratos no digeribles, por lo tanto, garantizan un buen funcionamiento del intestino.
  • Minerales y vitaminas: fortalecimiento de los huesos, de la visión y crecimiento, actividad antioxidante, factores de coagulación, entre otros.

Todos estos nutrientes mencionados deben estar presentes en la dieta de los perros no sólo cuando los mismos son cachorros, pero a lo largo del ciclo de vida. Lo que va a variar de acuerdo con la edad es la proporción de cada uno de ellos.

En cachorros, las formulaciones deben contener mayores proporciones de todos los nutrientes listados para que el perro pueda desarrollarse y crezca de forma sana.

Además, el número de comidas en este grupo de edad es mayor. Entre 2 y 3 meses de vida, se necesitan 4 comidas al día. Entre 3 y 6 meses, 3 comidas al día. Cuando termina la fase de crecimiento, este número cae a 2 comidas al día.

Por lo tanto, esta información puede ser tenida en cuenta al planificar el número de porciones en un envase de pienso para perros de las más diversas edades.

Las necesidades nutricionales de los perros adultos

De acuerdo con el manual de Merck Veterinary , para que el perro pueda ser alimentado como un perro adulto, debe haber alcanzado el 90% de su peso adulto esperado.

La raza del perro, junto con su edad y frecuencia con la que se ejercita, serán determinantes para decidir la cantidad de alimento ingerido. Por ejemplo, un perro que se ejercita muy generalmente necesita de un 20% a 40% más comida que un perro que posee poco movimiento.

En promedio, un perro adulto necesita ingerir diariamente al menos un 10% de las calorías procedentes de proteínas, un 5,5% de grasas y el 50% de los carbohidratos, incluyendo un 2,5% y el 4,5% de fibras. Por lo tanto, al formular un pienso para perros de esta franja de edad, es necesario tener en mente este equilibrio de nutrientes.

También debe tener en cuenta el estado físico del pet food que se está produciendo.Los alimentos secos poseen más nutrientes por mordida, por lo tanto, una menor cantidad será necesaria para cumplir los requerimientos nutritivos del perro.

Los enlatados poseen cerca de un 68% a 78% de agua. Estas formulaciones también poseen una mayor cantidad de carne, pescados, carne de aves y proteína texturizada que los piensos secos. Este contenido de humedad más alto es ideal para perros que tienen problemas en el tracto urinario.

Además, las formulaciones enlatadas también son una buena opción para perros que están con sobrepeso, ya que la sensación de saciedad es mayor.

Otra consideración importante a hacer es que los perros pueden consumir tanto proteína de origen animal como de fuente vegetal.

La calidad de las proteínas importa más que su fuente. Por lo tanto, es posible equilibrar una dieta vegetariana para los perros, siempre y cuando elijan formulaciones que garanticen todos los aminoácidos esenciales para el desarrollo del animal y que las proteínas contenidas posean alta digestibilidad.

Las necesidades nutricionales de los perros ancianos

En general, se consideran ancianos los perros que ya alcanzaron la mitad de su expectativa de vida.

Los perros menores viven, en promedio, 15-20 años, mientras que los mayores tienen una expectativa de vida en torno al rededor de 12-15 años. En esta fase de la vida, los perros necesitan dietas menos calóricas para prevenir la obesidad, un problema recurrente en este grupo de edad del animal.

En el caso de los snacks, deben ser saludables, bajos en grasa y sodio.Los perros ancianos también necesitan un mayor aporte de agua, por lo que las formulaciones enlatadas pueden ser una buena opción.

En caso de tener condiciones de salud específicas, la dieta de los perros también necesita ser adecuada. Por ejemplo, para perros diabéticos, es preferible una dieta baja en grasa y rica en fibra.

Fibras en abundancia también deben formar parte de la dieta de perros con problema de estreñimiento.

También es común que los perros ancianos pierdan masa muscular. De esta forma, es preferible una formulación que proporciona un mayor contenido proteico. En estos casos, se recomienda alrededor de 75 g de proteína por 1000 kcal al día.

Independiente del grupo de edad del perro para lo cual se está desarrollando un pienso, es necesario elegir ingredientes de alta calidad que garantizar el aporte de nutrientes necesarios a todas las edades planteadas.

Los aceites obtenidos a partir de fuentes animales tales como aceites de aves y grasa de cerdo que se utilizan de materias primas frescas son grandes fuentes de grasa para formulaciones para perros.Por ser de origen animal, poseen alta digestibilidad y palatabilidad, además de garantizar los ácidos grasos esenciales al desarrollo del animal.

Como un ingrediente proteico, el la proteína hidrolizada de pollo se presenta como una gran opción.También de origen animal, posee todos los aminoácidos esenciales y es un ingrediente de alta digestibilidad, garantizando una buena absorción por el organismo del animal, disminuyendo el volumen de heces.

Además, la proteína hidrolizada de pollo es obtenida por hidrólisis enzimática, lo que garantiza un proceso libre de solventes tóxicos, siendo ambientalmente más amigable.

Conclusión

Los perros poseen organismos complejos, por lo tanto, sus necesidades nutricionales varían de acuerdo con el grupo de edad de los mismos.

Por lo tanto, es posible la formulación de diferentes piensos que atiendan a cada franja de edad específica. Para ello, es necesario conocer las necesidades de cada una para garantizar piensos que permitan un desarrollo saludable del animal.

Independiente de la edad, las proteínas, grasas, carbohidratos, fibras, minerales y vitaminas deben estar siempre presentes en la alimentación de los perros a lo largo de la vida. Por lo tanto, es necesario siempre elegir ingredientes de calidad que sean capaces de suministrar nutrientes de alta digestibilidad y que cumplan sus funciones metabólicas.